Al menos 50 personas han muerto a causa de la ola de frío del Ártico que está azotando EE.UU. y Canadá.
BBC USA – Las autoridades en EE.UU. han informado del fallecimiento de al menos25 personas en la ciudad de Búfalo, en el estado de Nueva York, que ha sido descrita como una «zona de guerra», con cortes de electricidad y carreteras intransitables, lo que dificulta la labor de los equipos de emergencia.
Cuatro muertes ocurrieron en Canadá cuando un autobús volcó en una carretera helada cerca de la ciudad de Merritt, en la provincia occidental de la Columbia Británica.
El alcance de la tormenta invernal no tiene precedentes y se extiende desde Canadá hasta el sur del Río Grande.
Los meteorólogos dicen que la intensidad de la «bomba ciclónica» disminuirá en los próximos días, pero en muchas regiones del norte se mantiene el consejo de evitar viajar a menos que sea esencial.
Bomba ciclónica
Una «bomba cilónica» ocurre cuando la presión atmosférica cae en picado, provocando fuertes nevadas y vientos.
Se las conoce como bombas ciclónicas debido al poder explosivo que provoca la rápida caída de la presión.
Tales tormentas provocan un clima que va desde ventiscas hasta fuertes tormentas eléctricas y precipitaciones.
Las bombas ciclónicas son más comunes en la costa este de Estados Unidos y Canadá, donde la tierra fría y la corriente cálida de la Corriente del Golfo brindan condiciones óptimas para su surgimiento.
La gobernadora del estado de Nueva York, Kathy Hochul, dijo este domingo que «esta pasará a la historia como la tormenta más devastadora para Búfalo«.
Algunos de los fallecidos en el área fueron encontrados en automóviles o bajo la nieve, dijo un funcionario del condado de Erie a la agencia de noticias Reuters.
También se informó de muertes relacionadas con la tormenta en Vermont, Ohio, Missouri, Wisconsin, Kansas y Colorado.
El estado de Montana, en el oeste de EE.UU., es el más afectado por el frío, con temperaturas que bajaron a -50F (-45C).
En Canadá, las provincias de Ontario y Quebec son las más afectadas por la tormenta.
En Quebec, casi 120.000 clientes se quedaron sin electricidad el domingo. Las autoridades dicen que algunos hogares podrían tardar días en volver a conectarse a la red.