El Gobierno de Estados Unidos ha propuesto este lunes a las autoridades colombianas la instalación de oficinas en el Tapón de Darién para controlar el flujo migratorio procedente del sur del continente.
El Departamento de Estado estadounidense ha detallado que se trata de Puntos de Movilidad Segura que tienen como objetivo «identificar, registrar y conocer los motivos de la migración irregular para dirigirla por rutas legales».
«Se trata de prevenir riesgos a quienes pretenden iniciar o continuar esa migración irregular hacia Estados Unidos u otros lugares como Canadá», reza un comunicado, en el que agregan que la administración de estas instalaciones las manejarán conjuntamente Washington y Bogotá.
La idea de las autoridades estadounidenses es exportar el modelo que se establecerá en la frontera entre Colombia y Panamá para que esos centros se instalen también en otros países de la región.
«Colombia recibe la iniciativa con beneplácito al enmarcarse esta dentro del tenor de la declaración sobre migración y protección acordada en la Cumbre de las Américas en Los Ángeles, el 10 de junio de 2022. Se trata de un mecanismo que debe redundar en el beneficio del migrante y de sus Derechos Humanos», señala la misiva conjunta.
El Tapón del Darién, la inhóspita selva que separa Colombia de Panamá, registro en 2022 el paso de casi 250.000 migrantes y refugiados, casi el doble de los 133.000 de 2021, una cifra récord que se dispara especialmente en el caso de los ciudadanos venezolanos.
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) utilizó estos datos, recabados por las autoridades panameñas, para advertir en enero de este año de que esta ruta sigue estando especialmente transitada, a pesar de que «muchas personas han perdido la vida o han desaparecido» por el camino.
Fuente, Europa Press