El Gobierno de Ecuador rechazó el viernes las imputaciones de la familia del candidato presidencial asesinado el pasado 9 de agosto, Fernando Villavicencio, luego de que esta anunciara que presentarán una acusación por «omisión dolosa» contra el presidente Guillermo Lasso, el ministro del Interior, Juan Zapata, y el comandante de la Policía, Fausto Salinas.
«El Gobierno Nacional expresa su total rechazo a las denuncias presentadas tanto por una parte de la familia de la víctima como por un candidato a la Asamblea Nacional, y solicita que no se politice el caso y se permita al sistema de justicia avanzar con las investigaciones y llegue a una verdad procesal», dice un comunicado oficial del Ministerio de Gobierno.
El texto señala que desde el primer momento, el Gobierno puso en marcha todos los mecanismos para que la investigación avance y sean encontrados los autores materiales e intelectuales del crimen, e incluso se solicitó ayuda a la agencia federal de investigaciones e inteligencia de EEUU (FBI, por sus siglas en inglés) para agilizar la investigación.
«Para el Gobierno Nacional es inaceptable que se considere que la actuación del presidente de la República, del ministro del Interior y del comandante general de la Policía Nacional, en cuanto a la seguridad de Fernando Villavicencio, fuera «premeditada» con el objeto de «dejar en el abandono a un candidato Presidencial», agrega el comunicado oficial.
En rueda de prensa el viernes, Marco Yulema, abogado de la familia Villavicencio, informó que la denuncia de la familia será por el delito de asesinato, tipificado y sancionado, al considerarse que hubo una omisión dolosa en la protección del excandidato, quien fue ejecutado al concluir un mítin electoral en el norte de Quito.
(Sputnik)
