( Prensa Latina) Rusia abrió hoy una tímida puerta al fútbol nacional, al efectuar en la ciudad de Samara el primer juego desde el inicio de las medidas de contención contra la Covid-19, aplicadas hace casi tres meses.
Con la solución salomónica de efectuar juegos con público, pero solo al 10 por ciento de la capacidad del estadio, los equipos de Ajanet y Krili Savetov se enfrentan en la primera jornada de una temporada intensa del campeonato nacional que concluye a finales de julio próximo.
Sin encontrar en las gradas la actividad y apoyo de una masa de fanáticos, los jugadores al menos pueden escuchar aplausos y gritos, a diferencia de algunos de sus colegas en otros estadios europeos, donde las gradas debieron permanecer por ahora vacías.
En el Samara-Arena, los espectadores se vieron obligados a dejar de por medio tres asientos, después de pasar una comprobación de temperatura a la entrada del estadio, construido para el Mundial de 2018, y a donde es obligatorio acceder con mascarillas y guantes.
De esa forma, solo unos cuatro mil espectadores pudieron presenciar en vivo y sentir las emociones de lo ocurrido en el terreno en este primer partido pos-Covid, aunque la cifra de casi ocho mil casos en el día en este país alerta que la lucha contra la pandemia aún será larga.
Pero el regreso de fanáticos y jugadores al terreno verde en un moderno complejo como el Samara-Arena parece dar muchas esperanzas de que pronto solo el 10 por ciento falte para llenar esta instalación como en otros tiempos.
Antes de iniciarse el partido de esta jornada, las autoridades sanitarias sometieron a fumigación un área de 16 mil metros cuadrados en la zona del referido estadio.
Para los periodistas se mantienen las restricciones, pues los encuentros con la prensa son en régimen de videoconferencia, mientras en el terreno los jugadores tienen prohibidos los abrazos.
Además, para prepararse para este partido, los jugadores debieron pasar 14 días sin abandonar sus bases de entrenamiento y evitar contactos con allegados y familiares para descartar cualquier vía de contagio.
En fin, la Covid-19, al menos por ahora, parece imponer sus severas condiciones y muchos consideran que el futbol, un deporte de contacto evidente, ya tuvo la suerte de reanudar sus acciones.