La presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, demócrata por California, ha invitado este miércoles a un grupo de legisladores a un posible viaje de carácter oficial a Taiwán en medio de crecientes tensiones entre Washington y Pekín.
El principal líder demócrata en el Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes, Michael McCaul, ha asegurado que tanto él como el representante por Nueva York, Gregory Meeks, han recibido una invitación por parte de Pelosi, según ha recogido la cadena NBC.
Sin embargo, McCaul ha confirmado, a través de su portavoz, Leslie Shedd, que no podrá viajar a Taipei –un movimiento que no ha sido confirmado de forma oficial por la oficina de Pelosi–, debido a un compromiso previo, confirmó su portavoz, según ‘The Hill’.
Preguntada sobre si la posible visita de la presidenta de la Cámara de los Comunes a Taiwán, la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, ha afirmado que es «un tema real», ya que legisladores de los dos partidos están insistiendo en realizar la visita aludiendo a que, si no se hiciera, supondría «una victoria» para China.
Hay que recordar que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha indicado que el Pentágono no apoya la idea de que Pelosi viaje hasta la isla, una cuestión que provocaría un aumento de la tensión con el gigante asiático.
China no se quedará de brazos cruzados
En la tarde del martes, el portavoz del Ministerio de Defensa de China, Tan Kefei, advirtió de que el Ejército chino no se quedará de brazos cruzados ante la posible visita de Pelosi a la isla y actuará de inmediato para «socavar cualquier interferencia extranjera o escenario pro-independentista».
El posible viaje de Pelosi destaca las preocupaciones dentro de la Administración Biden sobre los planes de China en Taiwán, ya que Pekín ha intensificado sus acciones agresivas en los últimos meses. Además, funcionarios estadounidenses han expresado su preocupación de que esos movimientos lleven a Pekín a afirmar su autoridad sobre la isla.
China considera a Taiwán una provincia rebelde, pese a que la isla ha declarado su independencia y cuenta con el apoyo de Estados Unidos y la UE. En este contexto, la posible visita de Pelosi, que podría ocurrir en agosto, tendría un alcance histórico porque sería la primera presidenta de la Cámara Baja del Congreso de Estados Unidos que viajaría a Taiwán desde el republicano Newt Gingrich en 1997.