El expresidente uruguayo José Mujica cabildea con mandatarios sudamericanos una propuesta de integración a largo plazo para la región, según revelaciones suyas divulgadas hoy.
Su iniciativa fue presentada a los mandatarios de Argentina, Brasil y Chile, con los que se reunió en las últimas dos semanas, consigna el medio uruguayo En Perspectiva, en su edición digital.
Mujica promueve, entre otros aspectos, la libre circulación ciudadana sin pasaporte por Latinoamérica, la autorización a profesionales a ejercer en la región sin reválida de título, iniciativas de coordinación científica e incluye a mayor plazo un himno y bandera común.
El semanario local Búsqueda añade que el exgobernante quiere poner a consideración su proyecto al presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, al de Colombia, Gustavo Petro, al ecuatoriano Guillermo Lasso, entre otros del continente a quienes les hará llegar la iniciativa por escrito.
Nos interesa poner en la agenda una política de integración de largo plazo, dijo Mujica a En Perspectiva.
En la ocasión afirmó que “juntar nuestras debilidades para defendernos no es una cuestión de izquierda o de derecha”, sino de “ser o no ser en el mundo que se viene”.
En tal sentido clamó por la unión en defensa de la soberanía de las naciones de la región.
“Juntarnos para defender la soberanía de nuestras naciones. Es imposible que podamos discutir la tasa de interés que pagamos al sistema financiero internacional de a uno”, enfatizó.
Pepe Mujica, como le reconocen sus compatriotas y en otras latitudes, expresó la necesidad de trabajar en conjunto cada uno de los problemas que afectan al continente, en particular para vencer prejuicios y estereotipos “que nos crean trampas”.
“El problema es que los propios latinoamericanos no tenemos conciencia de lo que somos y lo que podemos jugar. Por eso estamos como una hoja al viento. El mundo nos precisa pero no nos van a reconocer si no somos capaces de hacernos reconocer”, abundó.
Encomió el rol de la inteligencia, el conocimiento y las investigaciones, porque, apuntó, el mundo que se nos viene es el del conocimiento.
Entonces una política de integración universitaria si queremos que América Latina suba a los escalones de desarrollo de la civilización humana. De lo contrario nuestro destino será “quedar en el pelotón de los irrelevantes”, concluyó.
Agencia Prensa Latina