(AFP) La oposición nicaragüense aprobó este jueves los estatutos para constituir una coalición nacional que busca enfrentar al partido de gobierno del presidente Daniel Ortega en los comicios del 2021, informaron sus dirigentes.
El bloque pide que se haga una reforma para mejorar el sistema electoral a fin de legalizar la coalición y contar con garantías de un proceso transparente.
«Los presentes estatutos dan por formada una coalición nacional» para «construir la nueva Nicaragua», indicó una de las dirigentes de la agrupación Anexa Alfred, durante una ceremonia en un hotel de la capital, que fue asediado por la policía.
Los estatutos fueron firmados por representantes de siete movimientos y organizaciones políticas opositoras, entre las que se destacan la Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB), que agrupa a 90 grupos adversos al gobierno, y la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia (ACJD).
Ambos movimientos surgieron tras las protestas que estallaron en 2018 en contra de una reforma al seguro social, que luego devinieron en una demanda para que el mandatario dejara el poder, tras la severa represión contra los manifestantes, con un saldo de 328 muertos, según grupos humanitarios.
También figura el movimiento campesino que nació hace siete años en oposición al frustrado proyecto chino de construir un canal interoceánico; el partido indígena Yatama y el Partido Liberal Constitucionalista (PLC, derecha) con representación parlamentaria y que gobernó el país entre 1997-2002.
«Este es el momento de demostrar que estamos unidos por este pueblo sufrido que necesita salir de esta dictadura», dijo el dirigente campesino Medardo Mairena, quien pasó casi un año preso por apoyar las protestas del 2018.
La coalición será presidida por un Comité Nacional integrado por representantes de las siete organizaciones políticas, que elegirán mensualmente a un coordinador entre sus miembros, según el documento.
Trabajarán en la organización territorial, en la constitución de una alianza nacional para el 2021 y definirá los mecanismos para la selección de candidatos a elección popular, entre otras.
Con la firma de sus estatutos, los dirigentes de la coalición avanzaron en la unificación para intentar sacar del poder a Ortega, un exguerrillero de 74 años al que acusan de gobernar desde 2007 con autoritarismo y corrupción.
El dirigente opositor y economista Juan Sebastián Chamorro dijo a la AFP que también tienen entre sus prioridades la liberación de 86 disidentes del gobierno.