El pasado viernes 13 de agosto del 2021 se efectuó el lanzamiento del nuevo cable de fibra óptica submarina en Guayaquil, Ecuador, que promete fortalecer la conexión y accesibilidad a internet, la televisión y los teléfonos de todos los ecuatorianos.
Este alambre es el cuarto que aterriza en el sector, siendo el primero en conectar Guatemala (Puerto San José), Ecuador (Salinas), Perú (Lurín) y Chile (Valparaíso), con una longitud de 7.300 kilómetros y una capacidad potencial de 132 terabites por segundo.
Al ser un cable compuesto por pares de hilos de fibra óptica y una cobertura de polietileno asegura protección a los múltiples riesgos marítimos a los que está expuesto tales como mordeduras de animales, pesca de arrastre, altas o bajas temperaturas, entre otras.
Víctor García, director regulatorio de Claro Ecuador, añade que el nuevo cable es de última generación, por lo que se ha construido en base a las experiencias tecnológicas del pasado, aprendido de ellas.
En el lanzamiento del nuevo cable Submarino estuvo presente Guillermo Lasso, presidente de Ecuador, Alfredo Escobar, presidente ejecutivo de Claro y la ministra de Telecomunicaciones, Vianna Maino.
El presidente explicó que el proyecto se debe a la inversión del sector privado, por lo que el país no asume ningún tipo de costo, y solo brinda beneficios.
“La tecnología al servicio de las comunidades significan mayores oportunidades de emprendimientos y negocios. Contar con un buen internet impulsa los servicios del poder turístico y genera empleo”, dice Lasso.
“Lleva un 96% de los servicios de internet a las casas, con una mejor capacidad, servicio y precio”, amplia Escobar.
“Hoy tenemos a un Ecuador más conectado con el mundo y el mundo con el Ecuador”, termina por añadir Maine.