Ecuador vive, este sábado 18 de junio, el primer día del estado de excepción declarado por el presidente, Guillermo Lasso, en las tres provincias que concentran las protestas contra el Gobierno, incluida la capital Quito.
«Anoche convoqué al diálogo y la respuesta fue más violencia. No hay intención de buscar soluciones. Dicen que luchan por el costo de la vida, pero cierran carreteras que provocan escasez, alza de precios y especulación. Dicen que quieren mejorar los servicios de salud, pero impiden el paso de ambulancias poniendo en riesgo de muerte a nuestros hermanos enfermos«, dijo Lasso durante su intervención.
El mandatario explicó, que los hechos de violencia que se han registrado desde el lunes, lo han obligado a declarar el estado de excepción “para defender la capital y defender el país”.
«Desde aquí, me comprometo a defender nuestra capital, defender el país. Hay gente buena que está marchando para reclamar causas justas. Demandas que todavía no hemos podido atender», agregó Guillermo Lasso.
En concreto, el decreto incluye la movilización de varias instituciones, el despliegue de operaciones coordinadas entre la Policía y las Fuerzas Armadas, limitación de las aglomeraciones, toque de queda que restringe la libertad de tránsito desde las 22:00 a las 05:00 en el Distrito Metropolitano de Quito, para preservar la seguridad ciudadana y el orden público, se detalla en una nota de CNN.
Asimismo, el anuncio de Lasso estuvo acompañado de un pliego de decisiones en materia económica, con el fin de aliviar lo que llamó «la difícil situación de muchas familias».
Por su parte, de acuerdo a la información reseñada en la agencia de noticias EFE, el máximo líder de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), Leonidas Iza, calificó como un triunfo del paro nacional, que el viernes cumplió su quinto día, a las medidas económicas expuestas por el presidente.
Sin embargo, cuestionó que no son las respuestas a las demandas del movimiento indígena y que tuvo que pasar una semana de protestas para que el Gobierno reaccione.
“Saludamos los puntos que se avanzan, aunque sean irrisorios, en algo ayudarán. Pero los temas de fondo, presidente de la República, usted no pretende resolverlos”, dijo Iza y, por ello, ratificó que el paro nacional seguirá su curso, de manera indefinida.
En medio de las protestas, el presidente de Conaie, Leónidas Iza, rechazó el llamado del presidente Guillermo Lasso para dialogar. Asimismo, recordó que el paro indefinido fue convocado después de un año de conversaciones sin éxito.
Entre los reclamos de los manifestantes está el aumento del coste de vida y el alza de los precios de combustibles. Por tanto, exigen un descenso de los costos, además de moratorias a las deudas y una reparación ambiental a los daños de la industria minera y petrolera.
AGENCIA EFE