Este jueves el precio de la luz en el mercado mayorista se volverá a disparar en España hasta alcanzar los 288,53 euros megavatio hora. Se trata de un nuevo récord histórico que no solo pulveriza los anteriores, sino que además supone la mayor subida de precio en un solo día nunca vista, con un aumento de 60 euros con respecto a la jornada precedente.
Además, el nuevo récord es un 26 % mayor al anterior, que data de este mismo miércoles, cuando se alcanzaron los 228,59 euros. En total solo ha habido cuatro días en la historia en los que se haya rebasado la barrera de los 200 euros, y todos ellos en este mes de octubre.
El precio de este jueves será un 52 % más caro con respecto a hace una semana, mientras que supone un aumento del 570 % con respecto a hace un año, cuando se pagaba 43 euros por megavatio hora. Mañana, el precio más elevado se registrará entre las 20 y las 21 horas, con 319,03 euros, mientras que el más económico se dará entre las 4 y las 5 de la madrugada, con 249,08.
Problemas en los mercados internacionales
Las subidas de los precios de los productos energéticos se viene produciendo en un escenario de encarecimiento de las materias primas en los mercados internacionales. Entre ellos destacan los incrementos de los combustibles fósiles, como la gasolina y el gas, y el de los derechos de emisión de CO2 asociados a esas fuentes de energía.
En el caso español, el gas lastra desproporcionadamente la factura eléctrica, debido a que el precio de esta tecnología, la más cara que entra en la subasta diaria eléctrica, es el mismo al que se abona al resto, incluidas aquellas mucho más baratas de producir, como la hidroeléctrica.
Sin embargo, no es un problema doméstico, sino que todas las economías europeas están sufriendo el encarecimiento de las facturas de los consumidores. España ya ha tomado algunas medidas, como rebajas impositivas y eliminación de retribuciones extras a las tecnologías no contaminantes, al igual que han hecho otros países del entorno.
Este lunes Francia y España se unieron para pedir a las instituciones europeas una solución conjunta, mientras que tan solo un día después, este martes, a los dos países se les unieron República Checa, Grecia y Rumanía, para suscribir una declaración conjunta en la que alertan de la situación y piden una respuesta europea.
Se reclaman cinco puntos: un paquete de medidas que ayude a coordinar las respuestas a las subidas a nivel nacional, que la Comisión Europea ya se ha comprometido a aportar la semana que viene; la puesta en marcha de una investigación sobre el mercado del gas, de reglas comunes sobre su almacenamiento y la coordinación en las compras para mejorar la capacidad de negociación europea; la reforma del mercado mayorista de la electricidad; el impulso de la independencia energética; y una regulación sobre el mercado de emisión de CO2 que evite la volatilidad de su precio.