(Caraota Digital, 8 de julio)
Todo parece indicar que el diálogo entre el régimen de Nicolás Maduro y el sector opositor, encabezado por Juan Guaidó, ha traído consecuencias inimaginables: el pasado viernes 5 de julio el diario oficialista Últimas Noticias publicó una información titulada “El Presidente se reunió con sus diputados para relanzar la AN”. En el texto se indica que Maduro está de acuerdo con que ellos, 43 en total, retomen sus curules en el Poder Legislativo.
Caraota Digital logró confirmar que la mencionada reunión sí se llevó a cabo para tratar en engorroso tema.
Un diputado del oficialismo, militar retirado, dijo vía telefónica, que la mencionada reunión se llevó a cabo en el Palacio de Miraflores.
“Yo no estuve presente en la reunión, solo participaron Yul Jabour, Diosdado Cabello, Cilia Flores, Carmen Meléndez y Edwin Rojas”, dijo el parlamentario.
Agregó que fue una reunión “cerrada”.
Indicó que desconoce los alcances de la misma, pero tiene entendido que durante el encuentro se trató la posibilidad de que los diputados del Psuv vuelvan a ocupar sus curules dentro del hemiciclo de sesiones.
¿Usted estaría dispuesto a incorporarse a la Asamblea Nacional de mayoría opositora?
“Yo acataría lo que decida el partido, soy un militante disciplinado”, dijo y colgó de inmediato la llamada telefónica.
Ésta sería una decisión tomada como parte de las conversaciones que se han llevado a cabo en Oslo y que ahora se retomarán en la isla de Barbados.
Una sola tarea
Al parecer se maneja este escenario para que cumpla una sola función: designar un nuevo Consejo Nacional Electoral (CNE) que realice elecciones generales durante el primer trimestre del año 2020.
Designar nuevas autoridades en el CNE requiere del voto de las dos terceras partes de la Cámara, es decir, 112 votos.
La oposición solo lograría esa cantidad si el Tribunal Supremo de Justicia permite la incorporación de los tres diputados indígenas, de todos los que están presos, refugiados en embajadas, en el exilio y en la clandestinidad.
La incorporación de los diputados del PSUV a la Asamblea Nacional sería un revés político para Nicolás Maduro quien ha dedicado gran parte de su tiempo a descalificar y perseguir a los diputados opositores.
Nadie sabe cuál sería el destino de la fraudulenta Asamblea Nacional Constituyente (ANC) presidida por Diosdado Cabello si lo anteriormente referido se lleva a cabo.
Jugando con la imaginación
Primero que nada los funcionarios de la Guardia Nacional, apostados en el Palacio Federal Legislativo, tendrán que devolver las llaves de todas las oficinas.
También tendrán que respetar y reconocer la autoridad civil de la directiva de la Asamblea Nacional y permitir con total normalidad el ingreso de los medios de comunicación independientes.
La situación se tornaría roja rojita dado que el presidente de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), Diosdado Cabello, deberá descender de su cargo y sentarse en el hemiciclo de sesiones como un diputado más.
La Primera Combatiente, Cilia Flores, deberá llegar al lugar custodiada por los agentes de la Casa Militar, tal como le corresponde por su condición.
El gobernador de Miranda, Héctor Rodríguez, deberá incorporar a su suplente, el esgrimista, campeón olímpico, Rubén Limardo.
Se desconoce si le permitirán al diputado Germán Ferrer, esposo de la Fiscal en el exilio, Luisa Ortega Díaz, incorporarse a su curul.
Los diputados Carmen Meléndez y Edwin Rojas, hoy son gobernadores de los estados Lara y Sucre, por lo tanto tendrán que incorporar a sus suplentes.
El diputado Elías Jaua, quien se ha alejado de la línea oficialista, deberá fijar una posición al respecto.
Lo más difícil de esta situación será lograr que los diputados del Psuv asuman el rol de minoría y aprendan a debatir y no a insultar y a humillar al adversario.