El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, dijo el viernes que tiene poca confianza en que Rusia cumpla su parte del trato alcanzado con Ucrania, Turquía y las Naciones Unidas para la reanudación de los embarques de granos desde Ucrania.
«La confianza de Canadá en la confiabilidad de Rusia es prácticamente nula. No han demostrado más que poca buena fe», dijo Trudeau en una conferencia de prensa.
Moscú ha «precipitado una crisis energética mundial (y) una crisis alimentaria mundial con su invasión de Ucrania, y el resto de nosotros hemos estado trabajando muy, muy duro para tratar de mitigar esos problemas en todo el mundo», remarcó.
No obstante, Trudeau es «optimista» de que la exportación de granos encontrará su camino «a lugares del mundo donde se necesita», en referencia al flamante acuerdo para reabrir las rutas de entrega bloqueadas del Mar Negro.
Debido a la situación bélica reinante desde fines de febrero, el ministro de Defensa ruso, Sergei Shoigu, y el ministro de Infraestructura de Ucrania, Oleksandr Kubrakov, firmaron acuerdos separados pero idénticos con funcionarios turcos y de la ONU en una ceremonia en Estambul presenciada por AFP.
El pacto establece «corredores seguros» para que los barcos ucranianos puedan entrar y salir de tres puertos del mar Negro, tanto desde la ciudad de Odesa como en sus alrededores.
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